Lo primero que hay que tener en cuenta es que no debemos considerarlo como algo normal y debemos darle la importancia que requiere.
Mucha gente convive con el sangrado de encías, habituándose a ello. Es necesario desterrar el mito: el sangrado de encías no es algo normal ya que nos está indicando que hay algún problema sobre el que de deberemos incidir.
Partimos de la base de que la encía sangra porque está inflamada, es lo que se conoce como gingivitis. Debemos buscar, por tanto, el origen de esa inflamación y ,en la mayor parte de los casos, la encía se inflama porque hay placa acumulada o bien restos de comida que favorecen la aparición de bacterias que al eliminar toxinas inflaman la encía y terminan produciendo ese sangrado.
En algunos casos, la placa se puede retirar simplemente con un cepillado rutinario en casa, pero lo habitual es que llegado a ese punto haya que retirarlo con una limpieza bucal profesional. De esta manera, conseguiremos que nuestras encías dejen de sangrar, si bien es cierto que todo depende también de las rutinas de higiene que mantenga en un futuro el paciente.
Si cuando detectamos que nos sangran las encías optamos únicamente por hacer uso de productos destinados como enjuagues, pastas dentales específicas, etc…conseguiremos reducir el sangrado sí, pero no estaremos abordando la causa del problema, más bien lo estaremos camuflando, por lo que la patología de fondo seguirá avanzando. Antes de optar por adquirir alguno de estos productos conviene visitar al dentista que será quien pueda elaborar un completo diagnóstico de nuestra situación bucodental.
Del mismo modo, si notamos que las encías sangran al hacer uso del hilo dental es por el mismo motivo, porque casi seguro haya una inflamación en las papilas, los espacios entre los dientes. Lo que ocurre es que al ser un espacio de difícil acceso con el cepillo, el sangrado sólo se produce cuando hay un contacto más directo con la zona, en este caso, cuando se usa el hilo dental.
Recuerda, la gingivitis es una patología que debe ponernos en alerta ya que es el estadio previo a patologías mucho más graves… Una encía inflamada es el proceso inicial de otro problema de mayor peso que es la enfermedad periodontal, la periodontitis, también conocida como piorrea.
La enfermedad periodontal siempre pasa por una fase inicial que es la gingivitis; de ahí el primer síntoma al que deberemos prestar especial atención es el sangrado.
Como siempre, ante cualquier duda, consulta con tu dentista de confianza.
By Dra. Cristina Martínez