La lengua suele ser la gran olvidada para la mayoría en cuanto a sus rutinas de higiene bucal. Nos cepillamos los dientes a diario, pero ¿y la lengua? Aunque no lo creas, ¡también necesita limpieza diaria!
Este músculo, el órgano del sentido del gusto y gracias al cual podemos diferenciar unos sabores de otros, es mucho más que eso. Si prestamos atención a la lengua podemos averiguar infinidad de cosas sobre el estado de nuestra salud.
Cuando este músculo está en plenas condiciones, muestra un color rosado y se visualizan sin problemas las papilas gustativas en su superficie. En cuanto al tamaño, en cada persona es distinto, pero si está sana no presentará hinchazón ni una textura irregular.
Posibles patologías que muestran la lengua alterada
Para la salud bucal es importante tener una lengua limpia y sana. Las bacterias también se acumulan en su superficie y si no la limpiamos a diario pueden pasar fácilmente a nuestros dientes y encías. Pero además de importante para la salud oral, la lengua también nos puede alertar de otras enfermedades:
Alergias: hinchada repentinamente y con una textura inusual suele ser síntoma de una reacción alérgica. Habitualmente al ingerir algún alimento.
Leucoplasia vellosa: esta enfermedad afecta a las membranas mucosas de la boca y está causada por el virus Epstein-Bar. Se trata de manchas blancas vellosas en los laterales de la lengua. Esto puede ser una de las primeras alertas del virus del VIH (Sida) o consecuencia de un sistema inmunológico débil.
Enfermedad de Kawasaki: se trata de una enfermedad rara infantil. Provoca que se inflamamen los vasos sanguíneos del cuerpo. La lengua es uno de los primeros síntomas de esta enfermedad, que es vital tratarla cuanto antes.
Suele aparecer lo que se conoce como ‘lengua de fresa’. Se denomina así porque se inflama y la recubre una capa blanquecina. También aparecen puntos rojos de gran tamaño. Recuerda así a la apariencia y textura de una fresa.
Problemas biliares: si se torna de un color amarillento puede ser un aviso de que el hígado no funciona como debería.
Los problemas más frecuentes que influyen en ella suelen ser por falta de higiene, y se observa una lengua blanquecina. Esto no reviste mayor gravedad, pero ante cualquier síntoma extraño, acude a tu Dentista de Confianza para que lo valore y confirme si se trata de un problema oral o de algo más grave.